LEVANTE
18 de julio de 2002

La nueva plataforma cultural amenaza con una querella si retiran las piezas del Carmen

Cultura paraliza el traslado del patio del Embajador Vich hasta el informe del CVC
La Conselleria de Cultura no retirará los elementos del patio del Embajador Vich del convento del Carmen hasta disponer del informe del Consell Valencià de Cultura que, según anunció, no era «vinculante» ni «preceptivo». Un responsable del departamento anunció el retraso de la actuación tras asistir a la presentación de una plataforma que amenaza con denunciar cualquier intervención sin retirar la clasificación de BIC.

Con los trabajos de desmontaje adjudicados ya a una empresa constructora y la previsión de iniciar las obras a principios de mes, la Conselleria de Cultura ha optado por la cautela a la hora de extraer del antiguo convento del Carmen los elementos renacentistas que servirán para la reconstrucción del Patio del Embajador Vich en el Museo de Bellas Artes . El jefe del área de Museos y Bellas Artes, Juan Carlos Lledó, anunció ayer que la administración autonómica no realizará ninguna intervención hasta disponer del informe del Consell Valencià de Cultura.Ello, según indicó, podría retrasar la actuación hasta finales del verano, una vez el órgano consultivo haya redactado su dictamen.

La conselleria ha optado, finalmente, por esperar al CVC a pesar de manifestar en varias ocasiones que el traslado de los restos no requería desclasificar el convento como Bien de Interés Cultural (BIC) y que no eran preceptivos ni vinculantes los informes de instituciones consultivas. Lledó, que compareció «a título individual» en la presentación de la plataforma Ciutadans per una cultura democràtica i participativa, indicó que «desde el punto de vista legal se han tomado todas las prevenciones» y reiteró que el reclamado al CVC no se incluye dentro de esta categoría. El responsable de Museos y Bellas Artes calificó como una «deferencia» la solicitud y reconoció que la comparecencia de la subscretaria Consuelo Ciscar y suya ante este organismo respondía a la voluntad de expresar la postura de la administración ante la polémica social suscitada. Según dijo, trasladó al órgano toda la documentación y los informes pertinentes.

Lledó compareció en la rueda de prensa de la nueva plataforma junto al jefe del servicio de museos y exposiciones, José Manuel Gironés, que también acudía, dijo, a título particular e hizo una defensa de las reconstrucciones de patios históricos. En su intervención, Juan Carlos Lledó se mostró abierto a dialogar con la asociación Ciutadans per una cultura democrática y participativa, aunque limitó a términos científicos y no legales los contenidos del mismo, alegando que estos últimos se han cumplido.

«Les invito desde ahora mismo a sentarse a la mesa, ver todos los documentos y comparecer», manifestó el jefe del área de museos.Lledó se acogió al artículo 38c de la Lay de Patrimonio para justificar que la desclasificación sólo era necesaria si se optaba por desmontar todo un edificio, una postura que contrasta con la de otros expertos, que se acogen a otro punto de la misma ley para defender lo contrario.

La constitución en una plataforma, en la que se integran Ex Amics del IVAM y miembros de varias asociaciones del barrio del Carmen, responde a la voluntad de ampliar a la protesta por el cierre del Centre del Carme, el malestar por la política cultural de la conselleria. La plataforma anunció que interpondrá una querella si la administración procede a retirar los elementos del Patio del Embajador Vich sin descatalogar previamente la declaración de BIC. En su opinión, la intervención de Ferreres «es parte consustancial de un edificio de interés cultural, no se trata de una mera exposición de restos renacentistas». Nacho París, portavoz de la plataforma, recordó que el propio jefe de arquitectura de la conselleria, Julián Esteban Chapapría se había opuesto al proyecto.

Apoyo de expertos

La plataforma, que se presentó apoyada por varios profesores y expertos en Bellas Artes, destacó la voluntad de abrir un debate social antes de iniciar los trabajos y argumentó que el proyecto plantea una «descontextualización histórica». Para la nueva asociación, la recuperación del gótico es «discutible» y supone «un atentado a la memoria viva del Carmen». Además, añadieron que si se considera un pastiche la disposición actual en la sala Ferreres, merecerá la misma consideración en la nueva ubicación.