Cultura abonó 600.000 euros en octubre y debe aún el resto a la empresa del ex director

LEVANTE-EMV, Alfons Garcia, Valencia.

Sábado, 09 Agosto, 2008

La decisión anunciada en abril de 2006 por la entonces secretaria autonómica de Cultura Concha Gómez de cancelar el contrato con la empresa de Luigi Settembrini (Contemporany Cultural Engineering Limited) para realizar la cuarta Bienal de las Artes se ha convertido en un proceso largo y caro para este departamento. El juzgado de primera instancia número 17 de Valencia acordó en septiembre pasado que la Generalitat debía pagar no sólo los 1.073.000 euros de la indemnización por la ruptura del contrato -ya había emitido una condena en este sentido en julio-, sino también 322.000 euros más en concepto de intereses y costas del litigio. En total, casi 1,4 millones, como recoge el informe de auditoría financiera de 2007 de la Fundación de la Comunitat Valenciana Bienal de las Artes (ahora llamada Fundación para la Promoción de las Artes Contemporáneas).

El citado documento especifica que la fundación, que ha recurrido el fallo, abonó 600.000 euros en octubre y solicitó al juzgado la suspensión de la ejecución de la sentencia, indicando que esta debería reanudarse si después del primer trimestre de 2008 no hubiera pagado la totalidad de la cantidad adeudada. La auditoría constata que no se ha saldado la deuda en el periodo fijado, por lo que el auto de ejecución de sentencia vuelve a estar en vigor.
La Fundación de la Bienal de las Artes ya reservó en 2006 casi un millón de euros en previsión de una condena por la rescisión del contrato con Contemporany Cultural Engineering. El dinero, sin embargo, no lo utilizó y en la liquidación de cuentas de 2007 aparecen 1,4 millones para el pago como “gasto extraordinario”.
La cifra representa un tercio del total de los gastos de la fundación en 2007 (algo más de 4,3 millones). Es también una de las razones de que la institución haya cerrado ejercicio con resultados negativos. El balance contable recogido en la auditoría revela unas pérdidas de 970.610 euros.
Settembrini dirigió las tres primeras ediciones de la Bienal y tenía desde julio de 2004 un contrato a través de la firma radicada en Londres Contemporany Cultural Engineering Limited para estar al frente de la cuarta. Sin embargo, Cultura argumentó en abril de 2006 que “causas mayores” obligaban a suspender la cuarta bienal, que al final se celebró en 2007 bajo el nombre Encuentro entre dos mares, en colaboración con la Bienal de Sao Paulo.